Anna Zoe Hagenauer es austriaca y estudiante Erasmus de nuestra Escuela. Debido a la crisis del coronavirus, tuvo que volver a Viena, pero no ha dejado de cursar sus estudios. Aunque desea volver a Valencia en cuanto sea posible, Anna está aprovechando al máximo esta nueva situación.
Hemos hablado con Anna y nos ha contado que siempre ha vivido en Viena, donde también estudia en la Universidad de Recursos Naturales y Ciencias de la Vida (BOKU Wien). Tras obtener el título de Grado en Gestión del Medio Ambiente, ahora estudia el Máster de Economía Agrícola y Nutricional.
Al ver que su tiempo universitario acabaría pronto, quiso aprovechar la oferta de Erasmus pasar pasar un semestre en el extranjero, en la maravillosa ciudad de Valencia. Desafortunadamente, por la situación actual de la crisis de coronavirus , ha tenido que regresar a Viena.
Ahora sigue tanto con sus asignaturas elegidas de la Escuela como con asignaturas de la universidad de Viena.
Anna, ¿cómo te has adaptado a esta nueva situación de las clases online?
Me he adaptado bastante rápido, aunque con un poco de confusión al inicio. Pero ahora ya estoy siguiendo con mis asignaturas de la Escuela y de la Universidad de Viena de manera online y la verdad es que lo paso bastante bien.
¿Qué ha sido lo más difícil?
Extraño mucho la presencia de otros alumnos y de los profesores y la presencia de debates más profundos. En la enseñanza presencial, me gusta mucho participar activamente y preguntar lo que no entiendo. En la nueva situación de docencia online no pregunto tanto y me falta la dinámica que existe en una clase física cuando se pueden ver las caras y el lenguaje corporal de los otros.
En general, además, me da mucha pena que mi semestre en Valencia se acabó de una manera tan abrupta. Pero tengo decidido regresar a esta ciudad maravillosa cuando la situación se calme porque quiero hacer al menos algunas de las actividades que tenía planificadas y que no pude realizar.
¿Tiene ventajas esta forma de docencia?
Hay muchos aspectos que facilitan los estudios para mí ahora. Tengo la posibilidad de lograr mucho en mis estudios universitarios en este período.
Como mi habitación en el piso compartido en lo cual yo vivo normalmente en Viena sigue subalquilada, estoy temporalmente viviendo sola en un pequeño piso. Eso era una situación nueva al principio, pero ya me he acostumbrado. La tranquilidad de vivir sola me permite un nivel de concentración en la casa que antes nunca tuve (normalmente prefiero estudiar en bibliotecas de la universidad). Por eso, estoy ahora haciendo no solo asignaturas de la Escuela, sino también asignaturas de mi universidad de Viena que estaba posponiendo desde años.
¿Crees que la universidad se ha adaptado de una manera rápida y eficaz a esta situación inesperada que estamos viviendo?
¡Si! La UPV y también la BOKU (mi universidad de Viena) se han adaptado muy rápido y eficazmente. Los sistemas de videoconferencias se han establecido bien.
¿Qué aprendizaje te llevas de esta situación?
Para mi, el aprendizaje más grande de esta situación tan particular de la crisis de corona es que realmente hay que vivir el momento, ¡porque de verdad no se puede saber lo que pasará mañana! Estoy intentando apreciar todo lo bonito que tengo en mi vida de la manera mejor.
Porque tampoco creo que esta crisis es la más grave que vamos a vivir. Con la crisis climática nos esperan todavía muchos retos.