Carmen Ferreras, estudiante del Máster Universitario en Ingeniería Agronómica de la EAMN, nos cuenta su experiencia.
Carmen es de León pero eligió estudiar aquí por el prestigio de la Escuela y de la UPV. “Un amigo de León que había cursado este máster me lo recomendó. Yo barajé otras posibilidades, pero también vi que en esta escuela podría aprender otros puntos de vista, con otros profesores y conocer otros cultivos diferentes a los que yo conozco en León, de carácter más extensivo”.
Otros factores que influyeron en la decisión de Carmen fueron que “Valencia es una ciudad que tiene un tamaño perfecto para vivir y que pensaba que aquí iba a estar cómoda”.
Y parece que Carmen no se equivocó, ya que nos cuenta que en este primer año de máster, ha podido aprender mucho. “Gracias a este máster, me he dado cuenta de que estoy bastante preparada, pero a la vez, he aprendido muchas cosas nuevas y, sobre todo, lo que yo buscaba, he podido conocer otros puntos de vista, otras opiniones, otras maneras de hacer las cosas. Está siendo una experiencia muy buena”.
Además de los conocimientos adquiridos, una de las cosas que más valora Carmen del máster es la posibilidad de hacer prácticas. De hecho, en septiembre realizará unas prácticas en la Conselleria de Agricultura, Medio Ambiente, Cambio Climático y Desarrollo Rural, hasta el 15 de noviembre.
“Son unas prácticas perfectas porque el horario es de mañanas, y puedo compaginarlas con el máster. En cuanto las acabe, pienso pedir más becas y compaginar las prácticas con el TFM. En esta Escuela es fácil solicitar prácticas, hay muchas opciones y es sencillo enterarte porque nos informan por correo electrónico, además de la información que podemos ir viendo nosotros”, nos comenta.
Carmen también destaca del máster que “la mayoría de los profesores son jóvenes y hacen que las clases sean dinámicas y amenas y lo que es más importante, nos hacen pensar y cuestionarnos nuestras ideas. Esto es muy bueno porque aprendes mucho más”.
Pero como no todo es estudiar, Carmen también está teniendo una estancia muy agradable, ya que se ha creado un grupo de estudiantes de Castilla-León, en el que ha hecho grandes amigos.
Carmen, además, ha podido participar este año, junto con otros tres compañeros, en el concurso 24 Horas de Agricultura Syngenta, que tuvo lugar en Coimbra (Portugal) y en el que quedaron en tercer lugar, lo que considera una gran oportunidad y experiencia. “Fue muy duro porque son 24 horas haciendo pruebas tanto teóricas como prácticas, sin parar, sin dormir, y teniendo que controlar el estrés, el cansancio, administrando el tiempo… pero lo recomiendo a todo el mundo y me encantaría repetir”.